Caldera Vaillant

Disponer de agua caliente en el hogar es, hoy en día, algo que no extraña a nadie, al menos en una ciudad mediana o grande. No hace demasiado tiempo para poder proveernos de agua caliente debíamos tener dos cosas básicas en las inmediaciones de nuestra vivienda: agua y leña (o carbón) para hacer fuego y calentarla.

La industria de los calentadores y calderas domiciliarias, ha dado pasos de gigante sobre todo en Occidente en las últimas décadas, de la mano de la expansión económica y la enorme inversión en construcción de viviendas. La caldera Vaillant, es un ejemplo de la vanguardia de esta industria. Su variado menú de calderas está basado en la aplicación de modernas y racionales técnicas de producción.

instalación de una caldera Vaillant

Si bien hay muchas personas que reniegan de algún tipo de confort hogareño por los muchos impactos negativos que procurárselo conlleva, nadie en su sano juicio renuncia fácilmente a abrir un grifo y sentir el calor en las manos, si tiene que lavar la vajilla, o en la espalda cuando toma un baño.

caldera de condensación Vaillant Ecotec

Así como el mando a distancia del televisor, o el teléfono móvil, el agua caliente se ha incorporado a nuestra vida doméstica casi silenciosamente. Se ha transformado en un bien preciado para nosotros. Aquellas épocas del esfuerzo inevitable para conseguir calentar agua (cortar y transportar leña, encender el fuego, llevar la batea a la tina de baño etc.) en una gran cantidad de ciudades alrededor del planeta, ha dado paso al uso de calentadores cada vez más eficientes y económicos, permitiendo el acceso al agua caliente de grandes cantidades de ciudadanos.